- Siempre supiste quien era y que hacia y nunca me lo dijiste, no, ahora no me vengas con que era por mi bien, no te creo, entiendes? Todo lo que sale de tu boca son puras mentiras asi que puedes ir despidiendote de mi, hasta nunca, Sr Maravilloso. -Bufé molesta, como odiaba que los hobres no me tomaran en cuenta solo porque no era lo suficientemente fuerte o ellos no me consideraban demasiado inteligente en otras palabras, con pocas luces. Que odio me daba, tenía una impotencia terrible ya que no podía hacer anda para remediar la situación, me senté en el sofa de cuero marrón y me dediqué a meditar.
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